Estilo democrático

Éste estilo de crianza es el más exitoso para los niños debido a su alto grado de implicación y a sus equilibrados niveles de control. Los padres democráticos proporcionan expectativas, normas y límites realistas y coherentes por lo que las consecuencias serán justas y naturales. Las consecuencias naturales son aquellas que se producen como resultado natural de la conducta del niño o por la falta de un comportamiento (como no estudiar para un examen o toca una estufa y quemarse ante los avisos de que no debe hacerlocrianza es un trabajo en equipo

Son padres afectuosos que escuchan y respetan el punto de vista de sus hijos y les ofrecen oportunidades para ser independientes. Hay normas y razones de que estén puestas, pero también son flexibles ante los límites y pueden hacer excepciones. Los niños tienen un buen desarrollo con las siguientes características: seguridad, buena autoestima, seguridad en sí mismo y asertividad.

Estilo autoritario

En este estilo los padres quieren que los niños obedezcan sin rechistar, son estrictos y controladores ante cualquier aspecto de la vida de sus hijos. Establecen normas rígidas con grandes consecuencias. Los niños que crecen bajo este estilo se vuelven ansiosos y tienen problemas de autoestima y de comportamiento. Características de los niños bajo este estilo de crianza: timidez, inseguridad, frustración, dependencia y rebeldía.

Estilo permisivo

En este estilo de crianza los padres son amorosos con sus hijos pero no les ponen normas ni límites. Son indulgentes, no utilizan el castigo y permiten que sus hijos tomen sus decisiones sin su guía y sin importar las consecuencias. Intentan ser amigos en lugar de padres mostrando poco control en la vida de los hijos. Los niños criados bajo este estilo de crianza presentan las siguientes características en su desarrollo: carecen de autodisciplina, pueden tener comportamiento de riesgos, impulsivos, comportamiento disruptivo, desinterés, ansiedad o baja autoestima.

Estilo negligente

Estos padres no están involucrados en la vida de sus hijos, no responden a sus necesidades. Puede ocurrir por una depresión por parte de los padres, por drogodependencia u otros factores como los padres adictos al trabajo. Es una forma de abandono. Los niños criados en este estilo suelen retirarse emocionalmente, tienen miedo y ansiedad. También presentas las siguientes características: baja autoestima, bajo rendimiento escolar, comportamientos de riesgo, sentimientos de soledad, depresión infantil o comportamientos agresivos.