El Método Tomatis tiene innumerables aplicaciones, ya que llega a la persona 
en su totalidad: cuerpo, mente, emociones y espíritu. El oído es el órgano sensorial más sensible de acceso al Sistema Nervioso Central.
Las sesiones de Escucha Tomatis aportan energía al cerebro, nos facilita una mejor escucha del otro y de nosotros mismos, nos ayuda en la comunicación, cómo hacerla más efectiva; nos ayuda en la concentración y la memoria, nos devuelve la creatividad, la intuición; y ayuda a una mayor relajación del sistema nervioso.
Estos efectos son muy valiosos en el mundo empresarial, ya que si las personas se encuentran mejor con ellas mismas y tienen la capacidad de desarrollar su potencial, las organizaciones se beneficiarán, y en último término, la sociedad también saldrá beneficiada.
Términos como creatividad, comunicación, cooperación, auto-escucha, manejo de las propias emociones – la llamada inteligencia emocional -, concentración, control del estrés; son esenciales dentro de las organizaciones.
Rosó Marcellés, Directora de Proyectos del Health Managing Consulting, ha publicado un interesante artículo donde explica cómo este método fomenta la proactividad, la gestión, y el desarrollo y acción personales:
“Método Tomatis y Desarrollo de Competencias de Eficacia Personal en las Organizaciones”.
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