Estudios científicos destacan el efecto Medicina de la buena música, y sin efectos secundarios.
Que la buena música afecta positivamente al ser humano y puede ser una de las mejores «medicinas», tanto para el cuerpo como para el alma, es algo de sobra conocido para quienes trabajamos con la Audio-psico-fonología.
El cardiólogo serbio Dr. Predrag Mitrovic ha estudiado el efecto de la música en pacientes con enfermedades cardiacas.
El Dr. Mitrovic decidió investigar si era posible dar al paciente la música como si fuera un medicamento, en dos o tres dosis diarias, y si esa música que se recetaba al paciente tenía efecto de medicamento.
En el estudio realizado por el Dr. Mitrovic y su equipo entre 2002 y 2009 participaron 740 pacientes cardiacos. La mitad de ellos recibieron terapia musical durante doce minutos dos veces al día.
Se utilizaba principalmente música instrumental, ya que las letras podían provocar emociones; y notaron que la música clásica tenía un efecto positivo en la mayoría de los enfermos, indistintamente de sus preferencias musicales.
En el artículo `La Música como receta para «curar» el corazón´ sobre los estudios del Dr. Mitrovic, se comenta también el potencial de investigación tan enorme que tiene el tema.
«El equipo de Mitrovic, junto con gastroenterólogos, ha empezado a investigar si la música aplicada reduce la excesiva excreción de acidez que puede causar úlcera, ya que el efecto de la música discurre por el nervio vago, tanto para el estómago como para el corazón.»
Los resultados de las investigaciones del Dr. Mitrovic fueron presentados por primera vez en un congreso de cardiólogos europeos en el 2009 en Barcelona.
Por otra parte, en el Congreso del 2011 de la Sociedad Europea de Cardiología, el Dr. Hans-Joachim Trappe, del Departamento de Cardiología y Angiología en la Universidad de Bochum, Alemania, presentaba la ponencia, «Music and Health: Clinical Implications» (Música y Salud: Implicaciones Clínicas).
El Dr. Trappe señala que el feto ya oye los sonidos altos desde la semana 20 de gestación, son las primeras impresiones sensoriales; que la música ayuda a la comunicación de los bebés y previene la hiperactividad en el adulto, además de prevenir enfermedades. Pero también señala que hay cierto tipo de música con un efecto negativo.
El Dr. Trappe hace referencia al estudio de Anca Amagdei et al., «Perinatal exposure to music protects spatial memory against callosal lesions» (La exposición perinatal a la música protege la memoria espacial contra las lesiones del cuerpo calloso). Este estudio ofrece nuevas vias a la neuroplasticidad inducida por la música.
Es interesante comprobar que lo que ya afirmaba el Dr. Alfred Tomatis hace más de 40 años: que el feto ya oye a partir de los cuatro meses y medio, y la importancia del Nervio Vago – que inerva también el oído – en el efecto de la música sobre nuestro organismo; ahora otros científicos y profesionales de la salud lo confirman.
Resulta interesante el artículo que escribió hace años Chris Mohr sobre el efecto de la música de Mozart y su uso en la Terapia Tomatis, «Mozart as Medicine».
Y qué mejor «medicina» para el alma en unos chavales que viven en unas condiciones medio ambientales y económicas difíciles que el placer de disfrutar de la música clásica con sus propios instrumentos reciclados
It is so gratifying to see people in various parts of the world confirming the health giving qualities of music. We know that music at a tempo of 60 beats will have a positive effect on circulation and on the organism as a whole.
Certainly if music can do the work of medication without any side effects, it makes sense that its use be incorporated into more and more situation, both at home and in institutional setting where it can be used with intention.
At this moment some of the applications are presented in ways that are expensive, but it is also possible to present solutions that are less costly and will create a desired effect.
We all ought to look for ways to make these effects more universally available. We already know they work.
Great article!
RP
Thank you Roberta, your comments are very illustrative. Let´s hope that the wonderful effects of good music is more widely known.
Desde la Alta Antigüedad se conocen los efectos de la música y sus beneficios para la Salud.
En la antigua China, y aún hoy en día, se utilizaban determinadas notas musicales para estimular la función de los diferentes órganos del cuerpo.
Se empleaban también los cantos de pájaros, que el enfermo llevaba a su casa para escucharlos de forma continuada. Aún hay puestos en algunos viejos mercados donde se alquilan diferentes especies de pájaros para las diferentes patologías.
El Dr. Padilla Corral, maestro en Medicina Tradicional China, psiquiatra, pediatra y geriatra, ha estudiado el efecto de la música en el organismo y lo ha utilizado en algunos pacientes con evidentes resultados.
Como ejemplo recomienda la música clásica así:
Para las patologías relacionadas con el Riñón y la Vejiga, los huesos, sistema nervioso, etc ., la música de Bach y el Canto Gregoriano.
Para el Hígado y Vesícula Biliar, músculos, tendones… la de Beethoven.
Par el Corazón e Intestino Delgado… La de Tchaickovski.
Para Bazo-Páncreas y Estómago… la de Mozart.
Para Pulmón e Intestino Grueso… Sibelius.
Es algo utilizado dentro de los tratamientos de Medicina Tradicional China.
Gracias
Gracias Huma por tan interesante comentario, es genial la relación que el Dr. Padilla ha hecho entre los diferentes compositores clásicos y los órganos a los que más directamente les beneficia. Según esta relación, no me extraña el efecto tan profundo a nivel energético de la Escucha Tomatis, trabajamos la Tierra, el centro de la persona, y el Agua, su esencia, su potencial. Gracias.